Me
volteo hacia el lado de tu cama,
buscando
la tibieza de tu cuerpo;
y tan
solo consigo el suelo frío,
marcando
lo lejos que me encuentro.
Giro
hacia ese lado contrario,
esperando
sentir tu mano inquieta;
tu
aliento al respirar tan cerca mío,
mas, tan
solo la fría noche me cobija
y me
eleva hacia incógnitos ensueños.
El insomnio se apodera de mis noches,
va llevándose consigo mi quietud;
al despertar, solo en mi mente los reproches
de que a mi lado no estás tú.
(Amor, cada vez que viajas.... yo...)
(Amor, cada vez que viajas.... yo...)
A.J. Pals